
Había una época en la que pensaba que la fuerza de voluntad lo era todo. Que si no te forzabas, no había manera de avanzar.
Incluso escribí un libro sobre la fuerza de voluntad.
Pero luego me di cuenta de algo.
No era falta de voluntad ni de disciplina.
Era que me hablaba como si fuera la persona que más me odiaba en el mundo.
Cada vez que quería hacer algo, aparecía la vocecita:
«No te va a salir bien.»
«Déjalo para mañana.»
«¿Y si la cagas?»
Y ahí estaba el problema. La disciplina no empieza con lo que haces, empieza con lo que te dices.
Pero saberlo no me dio la solución. Quería pero no podía…
No eres vago, pero tu cerebro quiere que lo seas
El cerebro no es tonto. Es un jodido genio de la comodidad.
Si detecta que algo cuesta esfuerzo, te lanza un discurso para que lo evites. Que si hoy no es el día, que si mejor esperas a estar tener más motivación, que si hace frío, que si hace calor, que si el horóscopo dice que no es buen momento...
Pero ¿y si esa voz interna no fuera la dueña de tus decisiones?
Porque la disciplina de verdad no es apretar los dientes y forzarte. Es programar la mente para que lo difícil te parezca fácil.
Es sólo un cambio de perspectiva.
Y eso es lo que hace el auto diálogo científico.
El día que me hackeé la cabeza
Recuerdo el momento exacto en que lo entendí.
Fue leyendo un libro de Shad Helmestetter. El primer libro que leí de él, lo vi claro que ese era el camino.
Si, había leído frases o artículos que lo decían, pero por lo que sea, no entendí o integré en mi interior hasta que leí su primer libro.
Después leí tres más, quería dominarlo, saber más.
No tuve suficiente y pasé con IA sus libros a audio libro en español.
Los escuché varias veces cada uno.
Ahora era consciente del cómo pero incompetente.
Me creé varios audios de auto diálogo científico.
Escuché formas de hacerlos, parámetros para hacerlo pero nadie lo había estructurado con un sistema que cada frase de auto diálogo científico estuviera deliberadamente programada.
Hasta que después de muchas horas de trabajo, logré descifrar con psicología cognitiva y otras disciplinas psicológicas como PNL entre otras, los 16 procesos que regulan un auto diálogo científico y lo perfeccioné con las mentalidades de personas exitosas cada una en su área hasta tener esta charla mental que me hace conseguir cada cosa que me propongo.
Y pum. Fue como si le hubiera quitado las pilas al mando a distancia del sabotaje mental.
La clave no era esforzarme más. Era no entrar en debate con mi cerebro y eso lo conseguía con unos auto diálogos deliberadamente preparados.
Deja de pelear. Programa.
Si cada día tienes que pelearte con tu mente para hacer lo que toca, lo estás haciendo mal.
Si cada mañana necesitas convencerte para moverte, algo falla.
Porque la disciplina emocional no es sufrimiento. Es tener un diálogo interno que trabaje a tu favor, no en tu contra.
Por favor, cambia ya el bla, bla, bla o ble, ble, ble de turno, aquí o en otro lado, pero cámbialo ya.
Repite, repite y avanzas.
Y si quieres cambiar lo que te dices y hacer que la disciplina deje de ser una lucha, en MenTalent.pro tienes lo que necesitas.
No lo pienses demasiado. Ya sabes lo que pasa cuando le das vueltas.